El
totalitarismo católico en el Perú
Por Herbert Mujica Rojas
hmujica@bigfoot.com
La presencia
mandatoria, imperante, decisiva y rectora de la Iglesia Católica
en el Perú llega con los conquistadores españoles
y tiene su primer choque con los vernaculares cuando el Inca Atahualpa
arroja al suelo, en señal de rechazo, la biblia que el padre
Valverde ofreciera a éste para su observación. Resultaba
obvio que el monarca inca, al desconocer la lectura, ignorara cualquier
símbolo de la religión recién llegada.
Sobre los adoratorios
incaicos se alzaron las iglesias católicas. La transculturización,
fenómeno ampliamente estudiado en las ciencias sociales peruanas
y que no es objetivo de este trabajo, encontró la ecuación
adecuada si no de reemplazar totalmente el culto indígena
por lo menos organizar las bases de lo que ha sido durante los últimos
500 años la Iglesia Católica, un centro de poder y
manipulación en todos los aspectos de la vida política,
social, cívica e histórica del Perú. El rito
romano reemplazó dioses, moldes, cánticos, liturgias.
Desde fines
del siglo XIX rigió el Concordato entre el Perú y
la Santa Sede Vaticana. ¿Qué significa esto? Según
Guillermo Cabanellas, en su magistral Diccionario de Derecho Usual,
en derecho canónico "es el acuerdo celebrado entre el
gobierno de una nación y la Santa Sede, sobre cuestiones
eclesiásticas de interés estatal también. En
esta acepción la palabra proviene del latín: pactum
concordatum. En el concordato se especifica la situación,
dimanada del carácter universal que la Iglesia posee en relación
con un Estado determinado. Como acuerdo, exige el consenso del Vaticano
y del gobierno correspondiente. Posee el carácter y fuerza
de un convenio o tratado internacional."
El Concordato
que rigiera sin interrupciones hasta el 19 de julio de 1980 entre
el Perú y el Vaticano, fue modificado por el gobierno de
facto de la segunda fase, poco antes de la asunción del nuevo
gobierno democrático y de la entrada en vigor de la Constitución
Política de 1979, el 29 de julio de 1980, pues ésta
había establecido la separación entre la Iglesia Católica
y el Estado al conceder a otras confesiones la misma posibilidad
de contar con la colaboración oficial en su artículo
86: "Dentro de un régimen de independencia y autonomía,
el Estado reconoce a la Iglesia Católica como elemento importante
en la formación histórica, cultural y moral del Perú.
Le presta su colaboración. El Estado puede también
establecer formas de colaboración con otras confesiones".
En la Constitución
de 1993 el vínculo entre el Estado y la Iglesia Católica
había sido consagrado como norma fundamental de la nación,
lo que en 1979 fue desechado.
"Deseosas
de seguir garantizando de manera estable y más conforme a
las nuevas condiciones históricas la tradicional y fecunda
colaboración entre la Iglesia Católica y el Estado,
celebraban un acuerdo sobre materia de común interés.....".
Se trata del Concordato de 1980, suscrito el 19 de julio de ese
año entre el gobierno militar a través de su ministro
de Relaciones Exteriores, Arturo García y el enviado del
Papa Juan Pablo II, monseñor Mario Tagliaferri.
En el artículo
VII se refleja el nuevo cariz del Derecho de Patronato que dice:
"Nombrado un eclesiástico por la Santa Sede para ocupar
algún cargo de Arzobispo u Obispo o Coadjutor con derecho
a sucesión, Prelado o Vicario Apostólico, o para regir
alguna diócesis temporalmente, la Nunciatura Apostólica
comunicará el nombre del mismo al presidente de la República
antes de su publicación; producida ésta, el gobierno
le dará el correspondiente reconocimiento para los efectos
civiles. Los arzobispos y obispos residenciales serán ciudadanos
peruanos"
El Derecho de
Patronato que se define en el Diccionario de Cabanellas, antecitado:
"Según el canon 1448 del Códex, es la suma de
privilegios y de algunas cargas que, por concesión de la
Iglesia competen a los fundadores católicos de iglesias,
capillas o beneficios, o a sus sucesores y el Patronato Público
(anteriormente Patronato Regio): "El que pertenece por razón
de dignidad de gobernante al de una república (o de un reino)
y es reconocido por la Iglesia a través de un concordato."
Resulta sumamente
interesante anotar que ningún Congreso de la República
soberano ha discutido y menos ratificado dicho Concordato. Es decir
rige para efectos múltiples, siempre en beneficio de la Iglesia
Católica y está por encima de las leyes peruanas.
El decreto ley
No. 23211, del 25-7-80, que no fue publicado en El Peruano y que
versa sobre el Concordato firmado días antes, en versión
de la institución Pro Libertad de Consciencia, PROLIBCO,
"otorga a la Iglesia Católica plena independencia y
autonomía, plena capacidad y libertad para la adquisición
y disposición de bienes así como para recibir ayuda
del exterior y para el otorgamiento de exoneraciones, beneficios
tributarios y franquicias entre otros."
"El otorgamiento
de estas exoneraciones, beneficios tributarios y franquicias se
ha hecho ignorando las atribuciones del Congreso de la República
contenidas en el artículo 56 de la Constitución ya
que "deben ser aprobados por el Congreso los tratados que crean,
modifican o suprimen tributos".
Resulta sumamente
interesante la contradicción con el Catecismo de la Iglesia
Católica que en su pregunta 2240 preceptúa: "La
sumisión a la autoridad y la correspondencia en el bien común
exigen moralmente el pago de los impuestos, el ejercicio del derecho
al voto, la defensa del país".
El Concordato
no sólo es abiertamente antinómico a las enseñanzas
del propio catolicismo sino también al derecho internacional
y a los preceptos contenidos en los tratados multilaterales relativos
a derechos humanos como son: Declaración Universal de Derechos
Humanos: artículos 2,7 y 18 sobre igualdad ante la ley; prohibición
de discriminación por razones de religión y a la libertad
de consciencia y de religión; el Pacto Universal de Derechos
Civiles y Políticos: artículos 2, 3 y 26, sobre la
discriminación por motivos de religión y protección
del derecho a igual protección de la ley y, el artículo
18 libertad de pensamiento y de consciencia; la Convención
Americana sobre Derechos Humanos: artículos 1 y 26 que prohíben
la discriminación por motivos de religión y establecen
igualdad ante la ley; el Pacto Internacional sobre Derechos Civiles
y Politicos: artículo 18, inciso 2: "Nadie será
objeto de medidas coercitivas que puedan menoscabar su libertad
de tener o de adoptar la religión o las creencias de su elección";
y el artículo 18, inciso 4: "Los Estados Partes en el
presente Pacto se comprometen a respetar la libertad de los padres
y, en su caso de los tutores legales, para garantizar que los hijos
reciban la educación religiosa y moral que esté de
acuerdo con sus propias convicciones; el Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales, artículos
2, incisos 1 y 2, artículos 4 y 5 incisos 1 y w, entre otros
artículos de estos y otros tratados que conforman el derecho
internacional público.
El Concordato
de marras ha permitido que la penetración vaticana emplee
al gobierno del Perú para:
1) Rechazar
a misioneros no católicos, negándoles o demorándoles
las visas.
2) Manipular la información de las encuestas sobre las afiliaciones
a las religiones.
3) Juzgar las creencias doctrinales de los grupos religiosos nuevos
antes de registrarlos en el gobierno.
4) Censurar los escándalos católicos en los medios
de comunicación, alimentar periódicos nacionales de
artículos contra los cristianos no romanos y acusarlos con
el término peyorativo de sectas, las cuales supuestamente
destruyen la unidad familiar y la identidad nacional.
5) Influenciar al gobierno y al Congreso para que apruebe leyes
exclusivamente a favor de la Iglesia Católica. Estas leyes
con nombre propio son el resultado de alianzas especiales, nada
santas, entre la Iglesia Católica y los gobiernos, con el
objeto de garantizar privilegios extraordinarios. Es aquí,
de donde emana el problema, de la actitud de muchos obispos católicos
que insisten en mantener privilegios especiales, ignorando a las
minorías religiosas y al mismo tiempo, proclamar la libertad
de culto según las declaraciones del Papa Juan Pablo II en
la Encíclica Papal Dignitatis Humanae.
Se pueden citar,
entre otros muchos ejemplos:
1) La ley 27178 del 29-9-99, referente al Servicio Militar que establece
en el artículo 31, exclusivamente a favor del clero secular
o regular católico, la exceptuación de este servicio,
violándose los principios constitucionales de igualdad ante
la ley el de que las leyes especiales sólo pueden expedirse
por naturaleza de las cosas, pero no por razón de la diferencia
de personas.
2) El Decreto Supremo No. 072-85-PCM del 16 de noviembre de 1984
que exonera del servicio militar en el activo y la reserva solamente
a los miembros del clero secular o regular en el ejercicio de su
ministerio, presentando la constancia respectiva del arzobispado,
siendo que el arzobispado no es autoridad civil electa, ni delegada
de autoridad electa.
3) Mientras el propio Estado paga los impuestos correspondientes
a los viajes de sus funcionarios y les exige un informe escrito
a su regreso, el Decreto Legislativo No. 821-96 sobre el Impuesto
General a las Ventas e Impuesto Selectivo al Consumo, inciso h),
dispone que no están gravados los pasajes internacionales
adquiridos por cualquiera en la Iglesia Católica, ya que
incluye hasta a los "agentes pastorales", no se menciona
a las demás instituciones filosóficas o religiosas,
ni se toma en cuenta los derechos de aquellos contribuyentes que
ha optado por no pertenecer a institución alguna y que con
sus impuestos solventan actividades proselitistas no conformes con
sus convicciones. Tampoco se sabe qué beneficios trae para
la comunidad en general, el viaje de dichos agentes pastorales.
4) La Resolución Suprema No. 508-93-PCM del 16 de noviembre
de 1993 que aprueba la directiva de procedimientos de aceptación
y aprobación, internamiento de donaciones de carácter
asistencial o educacional provenientes del exterior. En este dispositivo
legal el párrafo 5-2 exceptúa a la Iglesia Católica
de la inscripción en el Registro de Donaciones más
no así a las demás instituciones filosóficas
o religiosas.
5) La Resolución Ministerial No. 201-98-ED del 3 de marzo
de 1999 que aprueba los Programas Curriculares Básicos del
segundo y tercer ciclos correspondientes a tercero, cuarto, quinto
y sexto grado de educación primaria. En la formulación
de estos programas por el Ministerio de Educación, participan
representantes de la Iglesia Católica y no de las demás
instituciones filosóficas o religiosas.
6) El Texto Unico de Procedimientos Administrativos (TUPA), Ministerio
de Educación, exceptúa sólo a la Iglesia Católica
del requisito de "Registro de Donaciones" en su trámite
de aprobación y aceptación o donación de bienes.
7) El concurso público del Ministerio de Educación
en la Directiva No. 001-98-CN, Normas para la Ejecución del
Concurso Público para el nombramiento de Docentes y Directivos,
en el acápite 4, Condiciones para concursar, a la letra dice:
h) Los docentes que actualmente ocupan plazas orgánicas vacantes
en condición de contratados, asignadas en el marco del Decreto
Ley No. 23211 y la RM. 483-89-ED, y postulen a una plaza de la asignatura
de Religión de los diversos niveles, deberán contar
con la propuesta escrita de la autoridad eclesiástica correspondiente
(obispo de su jurisdicción).
8) La Resolución Ministerial No. 1104-98-IN/0104 del 19 de
diciembre de 1998, modificando el TUPA del Ministerio del Interior
en la parte relativa a la Dirección de Migraciones y Naturalización,
exonera a los religiosos extranjeros católicos más
no a los de otras iglesias o confesiones, del pago por derecho a
"Prórroga de Permanencia (30); "Prórroga
de Residencia (31.39)". "Pago de la Tasa Anual de Extranjería
(38); "En adquisición de la Doble Nacionalidad (48).
En buena cuenta el religioso católico está exonerado
del requisito de solvencia económica.
9) La ordenanza No. 137 del 19 de enero de 1998 de la Municipalidad
Metropolitana de Lima publicada en El Peruano el 29 del mismo mes
y año, en su artículo No. 7, Inafectaciones, sólo
comprende a la Iglesia Católica, pues dispone "Se encuentran
inafectos a los arbitrios de limpieza pública, parques y
jardines públicos y serenazgos, los predios de propiedad
de: ....d) Las entidades religiosas de la Iglesia Católica
que sean destinados a templos, conventos, monasterios y museos,
de conformidad con el acuerdo suscrito entre la Santa Sede y la
República del Perú aprobado por Decreto Ley 23111....".
10) La Resolución Ministerial 317-2001-JUS de fecha 7 de
setiembre del 2001, sostiene que se conforma una Comisión
Mixta encargada de proponer e implementar medidas de solución
de los problemas de orden inmobiliario y jurídico que atraviesa
la Iglesia Católica del Perú. La referida comisión
es integrada entre otros por: Carlos Valderrama Adrianzén,
Asesor Legal de la Conferencia Episcopal Peruana; Gonzalo Flores
Santana, Asesor Legal de la Conferencia Episcopal Peruana; Manuel
Merino Puente, Director de Asuntos Eclesiásticos de la Dirección
Nacional de Justicia del Ministerio de Justicia. ¿Metieron
a los gatos de despenseros?
De acuerdo al
informe realizado por la Oficina de Democracia, Derechos Humanos
y Trabajo del Departamento de Estado de los Estados Unidos del 5
de setiembre del 2000, se dice lo siguiente en cuanto a la carta
magna peruana:
The Constitution
provides for freedom of religion, and the Government generally respects
this right in practice; however, preferential treatment given to
the Catholic Church in education, tax benefits, and other areas
continued to raise concerns about potential infringements of religious
liberties of non-Catholics.
La Constitución
establece la libertad religiosa y el gobierno respeta este derecho,
sin embargo el trato preferencial recibido por la Iglesia Católica
en materia de beneficios tributarios, educación y en otras
áreas, eleva la preocupación hacia el irrespeto de
las libertades religiosas de los no-católicos.
Desde el punto
de vista legal el informe dice a la letra: "Moreover, there
are four areas in which Roman Catholicism, the Catholic Church,
and Catholic clergy receive preferential treatment and tangible
benefits from the State: education, taxation of personal income,
remuneration, and taxation of institutional property."
Hay cuatro áreas
en que los católicos romanos, la Iglesia y el Clero reciben
trato preferencial: educación, impuestos a ingresos personales,
remuneraciones e impuestos a propiedades institucionales.
En el acápite
Demografía Religiosa se informa que aproximadamente 22'048,356,
aproximadamente el 88.6% declaró su confesión católica.
Algo así como el 7.3% son cristianos no católicos,
evangélicos como luteranos, calvinistas, anglicanos, metodistas,
bautistas, presbiterianos, pentecostales y otras agrupaciones.
El totalitarismo
católico tiene encíclicas como la Dominus Iesus y
en ésta se dice: "Fuera de la mediación de la
Iglesia, todos, incluso los adeptos de otras religiones objetivamente
se encuentren en una situación gravemente deficitaria".
En Dominus se
anuncia: "A ustedes, personas religiosas del mundo, miembros
de las religiones, incluso más ancestrales que nuestro cristianismo
(como el budismo o el hinduismo), les anuncio esta desoladora verdad:
ustede no tienen fe teologal; sólo tienen "creencia";
sus doctrinas no son cosa del Espiritu sino algo que "ideó
el ser humano en su búsqueda de la verdad". Se expresa
a las iglesias ortodoxas que sólo son "iglesias particulares,"
sin plena comunión, por no aceptar el primado del papa. Y
con respecto a las evangélicas: "no son iglesias en
sentido propio.... son comunidades separadas". Para a continuación
decir: "La única verdadera religión se verifica
en la Iglesia Católica y apostólica, a la cual el
Señor Jesús confió la misión de difundirla
a todos los seres humanos. Sepan únicamente en ella está
la verdad. Todas las personas están obligadas a adherirse
a ella, pues fuera de esta verdad todos ustedes se encuentran en
el error".
La encíclica
que promueve la Iglesia Católica y cuyo autor es el cardenal
José Ratzinger representa un mentís total a la caridad
y a la democracia. No hay otra verdad que la católica, apostólica
y romana. Se pregunta el padre brasilero Leonardo Boff: "¿Cómo
se llegó a tal sistema totalitario, el romanismo, que tantas
víctimas causa, y que produce un discurso de exclusión
y de desesperanza? El capitalismo jerárquico romano es un
tipo de discurso no específico del romanismo, sino de todos
los totalitarismos contemporáneos, del fascismo nazi, del
estalinismo, del sectarismo religioso, de los regímenes latinoamericanos
de seguridad nacional, del fundamentalismo del mercado y del pensamiento
único neoliberal. El sistema es totalitario y cerrado en
sí mismo, en el caso de la jerarquía vaticana, un
"totatus" (totalitarismo) como decían los teólogos
católicos, críticos del absolutismo de los Papas.
La realidad comienza y termina allí donde comienza y termina
la ideología totalitaria. No existe nada más allá
del sistema. Todos deben someterse a él, como dice el documento
de Ratzinger, en "obediencia, sumisión plena de la inteligencia
y de la voluntad, dando voluntariamente asentimiento. La verdad
es sólo intrasistémica. Sólo los que obedecen
al sistema participan de los beneficios de la verdad que es la salvación.
Todos los demás están en el error".
Anota Boff en
su buida y penetrante exégesis: "Conocemos bien este
método en América Latina. Fue minuciosamente aplicado
por los primeros misioneros ibéricos que vinieron a México,
al Caribe y a Perú con la ideología absolutista romana.
Consideraron falsas las divinidades de las religiones indígenas
y sus doctrinas las tuvieron por pura invención humana. Y
las destruyeron con la cruz asociada a la espada. Los ecos de los
lamentos de los sabios aztecas resuenan hasta hoy: "Dijisteis
que no eran verdaderos nuestros dioses. Nueva palabra es ésa,
la que habláis. Por causa de ella estamos perturbados, incomodados.
Oigan, señores nuestros: no hagáis a nuestro pueblo
algo que le cause desgracia o que lo haga perecer. No podemos quedar
tranquilos". (A conquista da América Latina vista pelos
indios, Vozes, Petrópolis 1987, 21-22).
Siempre según
Boff en su refutación a Ratzinger, la Dominus Iesus trasunta
"la estrategia del documento vaticano obedece a la misma lógica
de los referidos totalitarismos: la de la desmoralización
y de la disminución hasta la completa negación del
valor teologal de las convicciones del otro."
Pero es preciso
preguntarse si ese fue el sentido originario del mensaje de Jesús.
Boff sostiene que "para hacerla aceptable entran en funcionamiento
los mecanismos de legitimación. La jerarquía vaticana
elabora la correspondiente teología, con el objeto de justificar,
reforzar y sacralizar su poder. Para hacer que ese poder sea irreformable,
intocable y absoluto, le atribuye un origen divino, cuando, en realidad,
es producto histórico y fruto de un proceso implacable de
expropiación."
Nótese
que la infalibilidad del Papa tiene un pasado vergonzoso en falsificaciones
y manipuleos del Testamento de Constantino y que fue Gregorio VII
en 1075 con su Dictatus Papae (la dictadura del Papa), la promotora
de esta inhumana concepción por la que "El Papa es el
único hombre al cual todos los príncipes le besan
los pies; su sentencia no debe esr reformada por nadie y sólo
él puede reformar la de todos; él no debe ser juzgado
por nadie". ¿Un super hombre o una superchería
de los tiempos modernos?
Hay un divorcio
evidente entre la jerarquía vaticana, sus encíclicas
y los pobres. Sin embargo la tradición teológica de
la iglesia argumentó siempre: donde está Cristo allí
está la Iglesia; y Cristo está en los pobres; luego
la Iglesia está en los pobres. No sólo en los pobres
trabajadores y buenos, sino en los pobres pura y llanamente por
el simple hecho de ser pobres.
Concluye Leonardo
Boff su aguda exégesis: "A partir de ahora no podemos
contar con la jerarquía vaticana para buscar la paz espiritual
y religiosa de la humanidad". Y además anota: Pero la
jerarquía romana no es toda la Iglesia, ni representa la
entera jerarquía eclesiástica mundial. Dentro de la
jerarquía hay cardenales, arzobispos, obispos y presbíteros
que siguen el camino evangélico del mutuo aprendizaje, del
diálogo abierto y de la búsqueda sincera de la paz
religiosa, asentada en la experiencia radical del misterio, que
se vela y revela a lo largo de toda la historia del universo y de
la humanidad y adquiere cuerpo -singular en cada caso- en las religiones
y en el cristianismo."
Esta diversidad
de interpretaciones teologales promovió la irrupción
de grupos católicos diversos. Unos cuestionaron de frente
al oficialismo vaticano y en Latinoamérica constituyeron
grupos vinculados a reclamos territoriales, sindicales, políticos.
Muchos de estos adhirieron a la Teología de la Liberación,
cuyo ideólogo fundamental el padre Gustavo Gutiérrez
fue y es peruano. Como era de esperarse, también se originaron
respuestas tradicionalistas y hasta sectarias.
Se ha venido
en llamar a este proceso etapas históricas del proceso de
atomización religiosa. Los grupos nacen a instancias de un
conjunto de circunstancias culturales, sociales y religiosas que
generan una cantidad de ansiedades y expectativas insatisfechas
en un sector de la población. La pequeña comunidad
se nuclea en torno a la figura de un "profeta", "gurú"
o "maestro" que elabora no tanto la doctrina cuanto directivas
concretas en orden al obrar e insertarse del grupo en la sociedad.
El grupo, luego
de que probablemente ha entrado en colisión no sólo
con otras confesiones religiosas sino también con distintos
ámbitos o instituciones del orden social en que se desarrolla,
comienza a buscar caminos que le permitan encauzar las irregularidades
o excentricidades que el apasionamiento de la etapa inicial hubiera
podido generar, y que puedan haber sido causa de que hayan perdido
aceptación social; hay una preocupación clara por
no generar conflictos y el buscar la estabilidad interna del grupo.
La transformación
de su imagen pública procura la estatura de una iglesia honorable
igual que las históricas.
¿Qué
importancia tiene lo antedicho frente a diversas ocurrencias de
la vida cotidiana? Mucha. La Iglesia Católica ha condenado
de antemano cualquier expresión contraria a sus diversas
expresiones. Por ejemplo, todas las organizaciones que difieran
de la educación sexual según Familiaris Consortio
37, exhortación apostólica de 1981, son parte de una
"educación sexual hedonista".
Para Adolfo
Castañeda, en el boletín 60, de enero/febrero, de
la revista Escoge la Vida, de 1996: "Al tratar el tema de la
educación sexual, inmediatamente nos encontramos con una
primera dificultad: la del uso que se le da al término: "educación
sexual". Para las organizaciones anti-vida, enseñar
educación sexual significa darle a la juventud una información
sexual gráfica y desprovista de valores morales, con un lenguaje
y una metodología que no respetan la modestia natural de
los niños ni la autoridad de los padres. A esta educación
sexual le podemos llamar "educación sexual hedonista",
para distinguirla de una positiva y prudente reacción sexual,
que los padres, en el momento oportuno, deben darle a sus hijos".
¿Cuál
es el momento adecuado y por causa de qué la Iglesia se cree
con el don inefable de señalar semejante horario?
Más aún,
el mismo Castañeda sostiene que "Para las personas que
respetan la vida y la familia, enseñar educación sexual
significa formar en los valores inherentes a la sexualidad humana,
que son la transmisión de la vida y la expresión del
amor conyugal y cuyo objetivo es que los jóvenes respeten
dichos valores por medio de la virtud de la castidad". Resulta
obvio que el expositor no toma en cuenta la poderosa como inevitable
influencia de la televisión, del cine, de los medios masivos
de comunicación que no piden permiso a la Iglesia Católica
para la publicidad de sus agresivas imágenes.
Tan temprano
como en 1998, la Conferencia Episcopal Peruana promovió el
I Congreso Internacional en Defensa de la Vida Humana y el III Congreso
de Planificación Natural de la Familia. Vida Humana Internacional
(VHI) colaboró extensamente en la preparación y ejecución
de estos eventos que fueron organizados por el Centro de Promoción
Familiar y Regulación Natural de la Natalidad (Ceprofarena).
Entre las personalidades e impulsores fundamentales se hallaban
el doctor Luis Solari de la Fuente (hoy ministro de Salud) y el
entonces congresista Arturo Salazar Larraín.
El doctor Luis
Solari ha trabajado durante largos años con la Conferencia
Episcopal Peruana y es un furioso católico a ultranza. En
conferencia ofrecida en Brasil, noviembre de 1999, Solari abominó
de los "nuevos enemigos del cristianismo" y señaló
que "tampoco es casualidad que la educación religiosa
se quiera cambiar o eliminar en los colegios estatales de América
Latina". Expresó su parecer que "estamos ante la
presencia de novísimas corrientes y estrategias neo-malthusianas,
que en América Latina son -por naturaleza- eugenistas, antisoberanas
y desnacionalizantes y antirreligiosas y descristianizantes".
En el referido
evento, Solari anota algunos conceptos como los siguientes: "educación
sexual perversa; el control natal es definitivamente un método
neo-darwinista; además de pretender violar el derecho de
los padres a educar a sus hijos, estos programas de educación
sexual promueven entre los niños y los jóvenes una
consciencia anti-embarazo y anti-maternidad y así una consciencia
anti-niño; utilitarismo sexual.
El fundamentalismo
del doctor Solari de la Fuente es más que evidente. Pero
creo importante señalar que en su disertación, en
la parte final, dijo lo siguiente: "Me refiero a los diferentes
intentos para modificar o eliminar los programas de educación
religiosa en las escuelas públicas y los diferentes proyectos
de ley de las llamadas "leyes de culto" que pretenden
modificar el status jurídico de la Iglesia Católica,
olvidando que tal status proviene de un tratado internacional entre
Estados. Ambas acciones estarían aparentemente dirigidas
a reducir la presencia del catolicismo, pero si vemos el escenario
en su conjunto, podremos ver que se trata fundamentalmente de reducir
sustancialmente la cristiandad en la región, como obvio paso
indispensable para poder intensificar las drásticas medidas
eugenistas y anti-soberanas que se están aplicando a nuestros
pueblos"
Con un talibán
predicador de la antropología católica como el doctor
Solari de la Fuente, ¿no empieza a garantizarse el totalitarismo
católico? Pero Solari no sólo es un fundamentalista
fanático, es también ministro de Salud y por tanto,
enemigo acérrimo de todas las organizaciones que no sigan
la línea de educación sexual en castidad de la Iglesia
Católica. ¿No ha llegado la hora de un cuestionamiento
frontal contra un extremista?
A partir de
1949, en Yauyos, el Opus Dei, prelatura personal promovida por José
María Escrivá de Balaguer en España, hizo presencia
en el Perú. Sus métodos en España y su infiltración
en Roma y en la curia católica es magistralmente narrado
por Alberto Moncada en su libro La Evolución del Opus Dei.
Moncada fue
el abanderado de la Operación Piura. Escribe así:
"Por aquellos años un montón de españoles
hacíamos las Américas. Emigrantes laborales y empresarios
inversores, curas y monjas de misiones, funcionarios de organismos
internacionales, cada uno con su biografía y sus propósitos.
La realidad con la que nos topamos, como pasa siempre, no era la
misma que la que imaginábamos y mucho menos, su interpretación,
que contrastaba con aquel relato de la hispanidad que nos habían
enseñado. Muchos oyeron por primera vez los reproches al
colonialismo español, la otra cara de la versión trascendente
de la epopeya descubridora que nos enseñaron en el bachillerato.
Pero aquella América Latina estaba mucho más preocupada
entonces por la tensión Norte-Sur que por la interpretación
de su historia......... Probablemente aquel momento latinoamericano
fue el punto de partida para la enorme mutación de la Compañía
de Jesús que lideró el vasco Arrupe. Los jesuitas
decidieron que su papel en América Latina no debía
seguir siendo la educación de los hijos de la burguesía
y entonces se presentó al Opus Dei la ocasión de sustituirlos,
lo que no dudó en aprovechar..... La operación Piura
tenía tres frentes, el legislativo, el económico social
y el pedagógico..... El frente económico social tenía
como principal protagonista al grupo piurano, encabezado por la
familia Romero, que había donado el terreno para instalar
la Universidad."
Reafirma Moncada:
"Sin embargo, y a lo que parece, el Perú eclesiástico
de hoy tiene una buena parcela opusdeísta, hasta ocho obispos,
que se han tomado muy en serio llevarle la contraria a la teología
de la liberación y a todo lo que suene a nuevo, así
como a bendecir el fenómeno Fujimori, amigo y compadre del
recién nombrado cardenal, Juan Luis Cipriani. Los directivos
del Opus Dei, bebiendo en las fuentes más conservadoras de
la Iglesia, siempre tuvieron querencias totalitarias, en el franquismo
se movían como el pez en el agua, luego en las dictaduras
de Chile y Argentina y siempre donde el poder civil y el eclesiástico
se concitan para limitar las libertades excepto, naturalmente las
económicas. Como explico más adelante, la doctrina
del Opus Dei, como la de tantos grupos afines, incluye un concepto
natural de la sociedad, la sociedad orgánica que es sencillamente
pre o antidemocrática. Los protagonistas de esta sociedad
y sus redes económico sociales son las familias, los grupos,
no las personas...... Para ellos los cambios son puramente instrumentales,
la humanidad sólo cambia de herramientas, olvidando que,
en este siglo, sólo dos herramientas, las comunicaciones
aéreas e Internet, nos están cambiando también
social y psicológicamente."
En La modernización
autoritaria de César Arias Quincot, se encuentran algunos
párrafos interesantes: "Los miembros de la Obra dicen
que su fin es sólo espiritual y que sus miembros tienen amplia
libertad para sus opciones políticas..... simplemente queremos
decir que la visión general que el Opus Dei difunde, (lo
que podemos llamar espíritu de la Obra) contiene elementos
autoritarios y conservadores que llevan a que numerosos miembros
del Opus Dei opten por puntos de vista conservadores y autoritarios
en materia política".
Arias denota:
"Más allá de las ligaciones de una u otra persona
con el Opus Dei, un aspecto muy significativo para nuestro análisis
está en un hecho clave: las personas ligadas al Opus Dei
levantan con fuerza la voz para justificar o defender (sea con los
argumentos que fuere) las acciones inconstitucionales del presidente;
y, en segúndo término, para rechazar con energía
los cuestionamientos hechos al gobierno en materia de derechos humanos".
Además
subraya Arias: "....los mismos personajes políticos
y eclesiásticos ligados al Opus Dei... Cuando se refieren
a temas ajenos al a coyuntura política, podemos ver que muestran
una actitud muy rígida a favor de la postura tradicional
de la jerarquía eclesiástica, oponiéndose al
empleo de métodos anti-conceptivos y hacen una defensa muy
neta de la "sobre-represión sexual" en términos
muy rigurosos. Actitud que corresponde a la mentalidad autoritaria;
es igualmente expresión de autoritarismo el rechazo a los
que asumen valores, actitudes y conductas diferentes; es decir,
la incapacidad para aceptar y respetar opciones de vida y valores
distintos a los suyos. Asimismo, encaja en la típica manifestación
de "personalidad autoritaria" (según Adorno) la
forma "tradicional" y "pulcra" al vestirse (vg.
una sotana elegante, en vez de pantalón y camisa que otros
sacerdotes e incluso obispos utilizan).
Un párrafo
interesante e imprescindible es que dice lo siguiente: "De
otro lado, el rechazo por la sexualidad es visible no sólo
en la rigidez de la defensa opusdeista de la línea oficial
del Vaticano en lo referente a contra-concepción (posición
cuestionada por no pocos teólogos, sacerdotes e incluso obispos)
sino por la exigencia de celibato a todos aquellos que, sin ser
sacerdotes, ocupan las más elevadas posiciones en la organización
de la Obra (numerarios). Con respecto a las mujeres, decía
el fundador de la Obra "no hace falta que sean sabias, basta
que sean discretas", es decir, la prudencia, la dulzura, virtudes
que, en el mundo patriarcal, se consideran como "de mujeres",
son exaltadas".
El cardenal
del Perú es Juan Luis Cipriani y su mando constituye la avanzada
latinoamericana del Opus Dei en nuestro continente. En el Perú,
como dice Moncada, hay 8 obispos todos del Opus Dei. En Argentina
sólo hay dos. Y el único cardenal del Opus Dei es
Cipriani y está en camino al papado. El Opus Dei domina las
finanzas y tiene extremadas ramificaciones en la jerarquía
vaticana. Cipriani ha sido un representante del totalitarismo católico
que se alió a la dictadura delincuencial de Fujimori, acalló
masacres y crímenes masivos en Ayacucho y propició
a través del soplonaje con adminículos electrónicos
(versión de gente que estuvo en la embajada) la masacre de
los emerretistas que tomaron en 1997 la sede diplomática
nipona. Es un fascista como el fundador del Opus Dei, Escrivá
de Balaguer, beatificado por Juan Pablo II.
A partir del
8 de diciembre de 1971, se funda en el Perú el grupo para-eclesial
Sodalicio de Vida Cristiana y reconoce entre sus fundadores a Luis
Fernando Figari Rodrigo y a Germán Doig Klinge (fallecido).
Fueron reconocidos por el Vaticano el 8 de julio de 1997.
El 21 de diciembre
de 1991, Mario Arenas escribió en la página editorial
de El Pueblo de Arequipa: "El discurso del señor Luis
Fernando Figari no convence, al contrario nos hace ver la altanería,
el autoritarismo, el fanatismo y la soberbia de una institución
ajena a las verdaderas aspiraciones del hombre al que se le impone
la suerte de ser crucificado a sus miserias e ignorancias. Su posición
será siempre irracional, de fuerte acento nazi-fascista.
Si la verdad revelada, como él la llama, no nos conduce a
la liberación y a la elevación de la consciencia,
ella está demás. No caben los absolutismos de Figari
cuando la complejidad de la realidad demanda profunda investigación
en todos los planos particulares para coronarlos con el descubrimiento
de las leyes universales y la filosofía sintetizadora de
los descubrimientos. La búsqueda de la verdad no sólo
le atañe a Figari -tal vez a es quien menos atañe
por su dogmatismo- nos atañe a todos por convicción
y responsabilidad."
Se reputa al
Sodalicio como una secta a la derecha del Opus Dei. Es decir, fanáticos
a rajatabla.
Es importante
dar algunos nombres que revelan a los líderes del Sodalicio:
Jaime Baertl Gómez, José Antonio Eguren, Emilio Garreaud
Indacochea, Aldo Giacchetti Pastor, Humberto del Castillo, Marcos
Nieto, Oscar Tokomura, Oscar Osterling, Javier La Rosa y Franca
Zadra, entre otros.
Entre las autoridades
de la Iglesia Católica que apoyan o simpatizarían
con el Sodalicio se encuentran: Juan Luis Cipriani, Josepth Ratzinger,
Luis Sánchez Moreno, Miguel Irízar Campos, Isaías
Duarte Cancino, Ramón Ovidio Pérez Morales, Cipriano
Calderón, Alfonso López Trujillo, etc.
Entre los simpatizantes
importantes se encuentran Patrick Wagner Grau; Eusebio Quiroz Paz
Soldán, Carlos Gómez de la Torre, la familia Vidauzárraga
dueña de La Ibérica de Arequipa.
Operan en Lima,
Arequipa y Chincha. En Latinoamérica en Chile, Brasil, Ecuador,
Colombia, Costa Rica y Panamá. Planean entrar en Argentina,
Buenos Aires, La Plata y Córdoba.
El señor
José Enrique Escardó ha narrado sus experiencias,
todas humillantes, durante los años que pasó en la
"escuela de adiestramiento" del Sodalicio en el balneario
de San Bartolo. Lo ha hecho públicamente sin ser jamás
desmentido.
En las IX Jornadas
Médicos Psiquiátricas "Emilio Majluf", Poder,
Corrupción, Violencia y Deontología, llevadas a cabo
los días 25, 26, 27 y 28 de abril del presente año
el doctor Héctor Guillén Tamayo presentó el
trabajo Sectarismo. Un problema de Salud Pública. Y sostuvo
que: "La salud es "el estado de equilibrio físico,
mental y social que se traduce en un silencio orgánico...
En el Perú el control mental es realizado abierta e impunemente
en jóvenes adolescentes de todos los estratos sociales...
El control mental o "lavado de cerebro" constituye un
delito contra la libertad de consciencia". Como motivación
de ponencia afirmó la urgente necesidad de toma de consciencia
médica de la existencia de este problema de salud pública;
de la forma subrepticia como se está desarrollando; de la
flagrante falta de información oficial y abierta; de la ausencia
de iniciativas institucionales de investigación científica;
de la inexistencia de legislación que defienda a las víctimas
de las sectas y a sus familias; de la falta de centros de rehabilitación
especializados para las víctimas de las sectas y sus familias".
Nótese
las coincidencias fundamentalistas y ortodoxas entre Solari y los
planteamientos de diversas encíclicas católicas. Si
a esto agregamos el cuadro sectario de captación de soldados
por parte de grupos en diversas partes del país, vamos descubriendo
un perfil de dominación simplemente peligroso.
En Arequipa,
en noviembre se produjo un hecho pleno en irregularidades y que
involucran a una entidad financiera, a los sodálites y a
un propietario a quien casi enajenan su bien inmueble.
El Banco Santander
se sirve de un pagaré fraudulento y procede a rematar la
propiedad del señor Fernando Gerdt Tudela. Quienes compran
el bien son los de la Asociación Civil San Juan Bautista,
organismo de los sodálites. En carta dirigida a Rino Passigato,
Nuncio Apostólico en el Perú, Gerdt, afirma lo siguiente:
"El jucio en que ha intervenido en Arequipa el sodalicio Javier
León Alvarez, "sacerdote" católico, como
representante de la Asociación Civil San Juan Bautista comprando
mi propiedad dentro de este proceso en remate, es un proceso ilegal
y nulo debido a que mi "supuesta" deuda puesta a cobro
en dicho proceso, está fundamentada con un pagaré
adulterado y declarado nulo en un proceso anterior, por resolución
firme y ejecutoriada."
Agrega Gerdt:
"Creemos que la referida Asociación Cristiana y "sin
fines de lucro", parte de los sodalicios y con quienes comparten
la misma dirección en La Pinta 130, San Isidro, Lima, no
deben participar en remates judiciales que son de por sí
cuestionables y significan el aprovechamiento de una situación
de desventaja para apropiarse del patrimonio ajeno, pero además,
la adquisición de mi propiedad que se ha efectuado en forma
irregular y cancelándose el precio ofertado con el cheque
de un tercero que carecía de fondos al momento de su giro".
Subraya aún
más Gerdt: "El referido proceso irregular va a traer
como consecuencia que en ejercicio de mi derecho de defensa sea
declarado nulo todo lo actuado tarde o temprano, además de
las acciones penales y la reparación de los daños
y perjuicios que me causen, trayendo como consecuencia que esta
adquisición por el señor Len sea declarada nula......
Los sodalicios actuaron premeditamente, como cómplices de
ilegalidades y delitos cometidos por el banco, ya que los conocían
con anticipación. .......En su afán de lucrar con
la adquisición, ya que pretende continuar con la misma, en
vez de desistirse de ella, pretenden con su intervención
dar legalidad a la ilegal actuación del banco, pero lo ilegítimo
siempre se mantiene en lo ilegítimo, como lo robado no deja
de ser robado, aunque se compre de "buena fe" para el
loable propósito de lucrar.
Aquí
hay algo inverosímil: la policía de asalto (¡tómese
nota!) llegó en diversos taxis para hacerse físicamente
de la casa del señor Fernando Gerdt, sita en la avenida Bolognesi
313, Yanahuara, Arequipa. ¿Qué tiene que ver la policía
de asalto en desalojos o acciones más bien judiciales? ¿Quién
contrató a estos policías cuyas acciones violentas
fueron repelidas desde el interior de la propiedad por Gerdt y un
grupo de amigos parapetados y dispuestos a dar la lucha hasta el
final? Todo fue filmado y reproducido en Arequipa. NO había
orden judicial para la toma de la propiedad y un juez preguntado
ante las cámaras evita responder categóricamente sobre
los intríngulis del asunto. Lo obvio, evidente, descarado
fue que los sodálites, combinados con autoridades corruptas
del poder judicial en esa ciudad sureña, más el auspicio
del Banco Santander, pretendieron arrojar a la calle al señor
Gerdt y dejarle sin su bien inmueble.
Sobre el particular
el señor Gerdt en su urticante carta al Nuncio abunda en
consideraciones y dice: "Los sodalicios no pueden hacer la
vida que quieran y decir que son parte de la Iglesia....... Por
tanto los sodalicios no pueden escapar a su autoridad y comportarse
como laicos cómplices de actos reñidos contra la moral,
la ley, la ética y evidentemente la doctrina cristiana. Hay
consenso en los círculos católicos arequipeños
y en el propio arzobispado que su actuación no es correcta,
por el contrario extremadamente controvertida, donde la mentira
y el engaño son comunes.
¿Qué
responde el Nuncio Passigato?: Estimado señor Gerdt: Recibí
el pasado día 4 de julio su Carta Notarial y la copia de
la Carta Notarial enviada al padre José Antonio Eguren Anselmi,
tomando conocimiento del delicado tema que contienen.
"Le agradezco
la confianza que ha tenido en hacerme llegar los problemas judiciales
que tanto le conciernen a usted y a su digna familia, así
como su preocupación por el bien de la Iglesia.... Como es
un problema ya resuelto jurídicamente, y no me compete sino
respetar el fuero de la justicia comúin, (ya que la Asociación
Civil San Juan Bautista no se enmarca en el ámbito de la
Autoridad Eclesiástica), le ruego encarecidamente que no
deje de buscar la vía del diálogo intentando las partes
una solución consensuada y equitativa"
En buena cuenta,
el Nuncio Passigato, cual Pilatos moderno, se ¡lava las manos!
NO sólo
eso. En Arequipa, los sodalicios han montado un servicio funerario
que compite deslealmente con otras similares porque al tener un
cementerio propio que no paga impuestos, pueden rebajar los costos
a límites intolerales para otras que están en el mismo
negocio y empiezan a cobrar. Hay cartas en que la funeraria sodálite
amenaza a quienes se atrasan en sus pagos por los nichos o tumbas
de sus familiares muertos, en que amenazan con retirar los cadáveres
hasta que se pongan al día. ¿Surreal? ¡No, absolutamente
verdadero!
Pocas semanas
atrás el señor Alt denunció las prácticas
totalitarias a que son sometidos los jóvenes sodálites
en su escuela de adiestramiento en San Bartolo y cómo es
que se han producido prácticas disociadoras que han separado
familias, creado zombies dispuestos a un fanatismo sin medida y
el escándalo que esta denuncia produjo, ya fue convenientemente
silenciada en diario y canales de televisión. El poder y
los que tienen poder se preocupan muy mucho de apagar incendios
cada vez que estos amenazan en la pradera.
El estudio puntual,
detallado de la acción predadora de los sodálites
rebasa los confines de esta investigación. Sin embargo, es
un tema urgente a ser considerado en cualquier interpretación
sobre cómo las sectas y los grupos fundamentalistas arrecian
en sus ataques subliminales y activos sobre las sociedades, en especial
la peruana.
Al momento de
culminarse el presente trabajo, el cable trae la noticia que el
papa Juan Pablo II aprobó la canonización definitiva
de Escrivá de Balaguer, mentor y fundador del Opus Dei, grupo
que ha capturado llaves muy importantes en los mecanismos del poder
vaticano. Amén que esto significa un respaldo obvio y claro
para una agrupación que tiene, como ya hemos dicho, 8 obispos
en el Perú. Y nada menos que el cardenal Cipriani es del
Opus Dei. Confírmase pues que Perú constituye la cabecera
de playa de la invasión opusdeísta.
El totalitarismo
católico es vasto y abrumador. Conspiran contra su eliminación
la melindrosa y pusilánime prensa peruana en todas sus formas,
como también la cobardía política de parlamentarios
y autoridades en general.
Este trabajo
abre el perfil de una nueva forma de interpretar la presencia católica
a través de una Iglesia institucional altamente comprometida
con estrategias anti-populares, anti-científicas y claramente
violatorias de múltiples derechos humanos.
Herbert
Mujica Rojas
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